Un San Valentín inolvidable: Termales y romance en Villa de Leyva

Si hay un momento ideal para sorprender a tu pareja con un plan especial, es Amor y Amistad. Pero, ¿Qué hacer cuando quieres algo más que la clásica cena con velas?

Hace dos años, me enfrenté a ese dilema. Quería sorprender a mi pareja con algo diferente, un plan que combinara descanso, aventura y, por supuesto, mucho romance. Sin mucha idea de a dónde ir, me puse a buscar y encontré el plan perfecto en Villa de Leyva: un día de relajación en termales, barro terapia, cena romántica y cócteles. Todo sonaba increíble, así que reservé sin pensarlo dos veces.

El viaje: de Bogotá a un oasis de descanso

El sábado, sin revelar demasiados detalles, emprendimos el viaje. Salimos temprano por la autopista norte para evitar trancones y tomamos la vía Tunja - Samacá - Sáchica. La ruta nos regaló paisajes increíbles y un trayecto fluido.

Tras dos horas de viaje y algunos peajes pagados, llegamos a nuestro primer destino: Termales La Portada de la Villa, ubicados justo en la entrada de Villa de Leyva. La emoción en la cara de mi pareja fue suficiente para confirmar que había tomado una gran decisión.

Bienestar total: sumergidos en aguas termales

Apenas entramos, el ambiente nos envolvió con su tranquilidad. El lugar tenía dos zonas termales con aguas naturalmente calientes y minerales que ayudan a relajar los músculos, mejorar la circulación y aliviar el estrés acumulado.

Pasamos dos horas en un estado de absoluta relajación, sintiendo cómo el agua tibia nos renovaba. Entre risas y momentos de silencio compartido, nos desconectamos del mundo y nos enfocamos en lo más importante: nosotros.

Una cena digna de la ocasión

Después de nuestra sesión en los termales, el hambre se hizo notar. Nos arreglamos un poco y fuimos a un restaurante con vista a las montañas para disfrutar un almuerzo espectacular.

Pedí un Filet Mignon con una salsa exquisita, mientras que mi novia se decidió por un róbalo en salsa de camarones. Para acompañar, brindamos con dos Gin Tonics que hicieron el momento aún más especial.

Caminata nocturna por las calles empedradas

Con el estómago feliz y la mente despejada, seguimos nuestra escapada romántica explorando las calles empedradas de Villa de Leyva. La magia de este pueblo colonial es algo que no se puede describir con palabras, hay que vivirlo.

El frío de la noche, la iluminación cálida de los faroles y el sonido de los pasos sobre las piedras crearon un ambiente perfecto para cerrar el día con broche de oro.

El plan perfecto para celebrar el amor

Este fue solo uno de los muchos planes que se pueden hacer en Villa de Leyva. Aguas termales, gastronomía, paisajes espectaculares y momentos inolvidables en pareja. Sin duda, repetiría esta experiencia una y otra vez.

Y tú, ¿ya sabes cómo vas a sorprender a tu pareja este Amor y Amistad? No dejes que la rutina se robe la magia, encuentra el plan perfecto en Dplan y regálate un momento inolvidable. ❤️